Basílica de la Virgen de Agua Santa

Iglesia en Baños

La Basílica de la Virgen de Agua Santa, también conocida como el Santuario Nuestra Señora del Rosario de Agua Santa, es uno de los principales atractivos religiosos y culturales de Baños de Agua Santa, en la provincia de Tungurahua, Ecuador. Este templo semi-gótico, construido entre 1904 y 1944, es considerado un refugio espiritual y un símbolo de fe para la comunidad local y los miles de peregrinos que lo visitan cada año.

📍 Ubicación y cómo llegar

  • Dirección: Esquina de las calles Ambato y 12 de Noviembre, en el centro de Baños de Agua Santa.

  • Cómo llegar: Desde el centro de Baños, la basílica se encuentra a pocos minutos a pie. Si viajas desde Ambato, puedes tomar un bus interprovincial que te llevará directamente a Baños.

🕍 Qué puedes hacer

  • Visitar la iglesia: Admira su arquitectura de estilo semi-gótico, con tres naves y grandes arcos ojivales. El interior alberga una colección de murales pintados por el fraile Enrique Mideros, que representan los milagros atribuidos a la Virgen de Agua Santa.

  • Explorar el museo: Ubicado en el convento de los Padres Dominicos, el museo Fray Enrique Mideros exhibe arte religioso, pinturas, vestimenta de la Virgen y objetos históricos. La entrada cuesta $1 para adultos y $0.50 para niños.

  • Visitar la gruta y el adoratorio: Junto a la basílica se encuentra una gruta donde los fieles depositan velas en agradecimiento o petición. Es un lugar de reflexión y devoción.

⏰ Horarios

  • Misas:

    • Lunes a viernes: 07:00, 11:00, 16:00 y 18:00.

    • Sábados: 07:00, 09:00, 11:00, 16:00 y 18:00.

    • Domingos: 06:00, 08:00, 09:00, 10:00, 11:00, 12:00, 14:00, 16:00 y 19:00.

  • Museo:

    • Miércoles a domingos: 08:00–12:30 y 14:00–17:00.

  • Horario de atención general:

    • Diario de 09:00 a 19:00.

💰 Costos

  • Entrada al museo:

    • Adultos: $1.00.

    • Niños: $0.50.

  • Bendición de vehículos: Contribución voluntaria.

La Basílica de la Virgen de Agua Santa es un lugar de gran significado religioso y cultural. Su construcción desafió el tiempo y la historia, siendo un refugio durante las erupciones del volcán Tungurahua, donde las personas que se refugiaron en ella salieron ilesas. Cada año, en octubre, se celebra una fiesta en honor a la Virgen, donde las calles se llenan de música, danza y devoción. Además, el museo ofrece una visión profunda de la historia y la fe local.

 
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